viernes, 24 de noviembre de 2017

Estamos aquí de casualidad

La historia "oficial" reconocida hasta ahora es que, muy resumida, estamos aquí porque hace 65 millones de años, como consecuencia del impacto de un asteroide de unos 10 Kms. de diámetro en el Golfo de México, se extinguieron los dinosaurios. Porque, gracias a ello, unos animalillos pequeños e indefensos (a los que ahora denominamos mamíferos, porque tenían la peculiaridad de albergar a sus crías en el interior de sus cuerpos hasta el momento del "nacimiento" y alimentarlas en los primeros meses de su vida mediante leche materna producida en sus glándulas mamarias, y no en huevos externos como la mayoría de las especies terrestres de por aquel entonces) encontraron un ecosistema un poco más amigable donde poder vivir y evolucionar. Y de los mamíferos primitivos, parecidos a ratas grandes, fueron surgiendo los distintos órdenes: Euterios, Exafroplacentalia, Boroeuterios,... hasta llegar a los primates y, después, a los homínidos.

¿Y qué pasa, que no fue realmente así? Bueno, en términos generales la historia no cambia. Pero lo que un reciente artículo publicado en la revista Nature (Nov. 2017) y titulado: "Site of asteroid impact changed the history of life on Earth: the low probability of mass extinction" por Kunio Kaiho y Naga Oshima, propone es que los dinosaurios se extinguieron por las peculiares características geológicas del sitio donde impactó el asteroide. Que si hubiera impactado en otro sitio, es muy probable que las consecuencias hubieran sido muy distintas. Y, esto es lo sorprendente, que sólo un 13% de la superficie terrestre presenta estas características. O sea, que, como dice el título del post, "estamos (los seres humanos) aquí de casualidad". Pero, vamos por partes.

viernes, 17 de noviembre de 2017

Una "invasión" musulmana más verosímil

Si miras el mapa "oficial" de las fechas y trayectoria de la "invasión" musulmana de la Península Ibérica, la conclusión que se saca es que bastaron 3 años (desde el 711 al 714) para que las tropas árabes (luego hablaremos de cuántos podían ser) partiendo de Guadalete, en la provincia de Cádiz, alcanzaran Lugo, Astorga, Gijón y Zaragoza. No está mal, teniendo en cuenta que el "viaje de vuelta" (conocido como Reconquista) les costó a los ejércitos cristianos 770 años (desde 722, batalla de Covadonga, hasta 1492, conquista de Granada). Algo no cuadra, o al menos, no parece que todo fuera como nos lo han contado. 

Tampoco resulta fácil buscar "pistas" que ayuden a conformar una historia más verosímil. Pero alguna hay. Vamos a ir comentándolas y luego...  que cada uno saque sus conclusiones. 

jueves, 9 de noviembre de 2017

Señores, licencia pido...

Grupo de danzas "La Esteva" - Segovia
"Para empezar a cantar,
Señores, licencia pido;
no digan a la mañana
forastero y atrevido".

(Jotas de Vegas de Matute (Segovia)
Interpretación del Nuevo Mester de Juglaría aquí.)

A veces piensas que, por el hecho de que algo parece que siempre ha estado ahí, se trata de una "tradición milenaria". Y no siempre es así. Fue a raíz de ver la película-documental de Carlos Saura "La Jota" , estrenada en Diciembre de 2016, que me interesé por el orígen de la jota y sus distintas variantes, algo que se ve muy bien reflejado en la película. 

El dato que me rompió todos los esquemas fue saber que la primera vez que se tocó una jota en Corella (Navarra) fue en 1867 (prácticamente antes de ayer). ¿Finales del siglo XIX para llegar al corazón de la Ribera navarra? Tirando del hilo, descubro con sorpresa que la archiconocida jota aragonesa sólo es de finales del siglo XVIII... ¿Y la castellana?  Pues también, finales del XVIII. O sea que ni Isabel, ni Juana, ni ninguna de las reinas de Castilla se habían bailado una jota? Vaya, pues  entonces... ¿de donde viene esto de la jota?

viernes, 3 de noviembre de 2017

La cultura Mogollon

Me imagino que la M mayúscula y el que vaya sin tilde te ha intrigado. Y más, asociado a la palabra "cultura". Efectivamente, no voy a hablar de la palabreja que se nos ha incrustado en el lenguaje cotidiano de jóvenes y no tan jóvenes desde hace pocas décadas(*); para eso hay "mogollón" de páginas en Google ;-). Sino de una de las interesantes culturas nativas del Sudoeste americano: la Mogollon. En inglés lo escriben sin tilde, aunque lo pronuncian como palabra aguda (y suena algo así como "mogouiión"). 


Para empezar, se trata de un "bautizo" relativamente reciente. Fue el arqueólogo americano Emil W. Haury (Newton, Kansas 1902 - Tucson, Arizona 1992) quien, en 1936, propuso este nombre para una de las "culturas" que él identificó como anteriores y diferentes a los Anasazi, los por entonces únicos indígenas supervivientes. Luego entramos en detalles.