viernes, 8 de abril de 2022

La "fake news" sobre el aluminio que lleva 1.500 años circulando

Prueba de agudeza visual: ¿Qué tienen en común todos los objetos que aparecen en el collage?


Efectivamente, son objetos de aluminio, o en donde el aluminio es su principal componente. De hecho, el aluminio es el tercer elemento más abundante en la corteza terrestre, detrás del oxígeno y el silicio. Constituye el 8,3% de la masa terrestre. Vivimos rodeados de objetos de aluminio. Pero no siempre fue así... Viajemos 2.000 años atrás en el tiempo...


"Cayo Plinio Cecilio Segundo, conocido como Plinio el Viejo, nació en la ciudad de Como, en Italia, en el año 23 d.C. Fue un comandante naval y del ejército en el Imperio Romano temprano, y, más tarde, un autor, naturalista y filósofo natural. Plinio el Viejo fue muy conocido por su "Naturalis Historiae": una enciclopedia de treinta y siete volúmenes que describía todo lo que había que describir en ese momento.

Naturalis Historiae incluyó un libro sobre cosmología, otro sobre agricultura y un tercero sobre magia. Le llevó cuatro volúmenes cubrir la geografía mundial, nueve para la flora y fauna y otros nueve para la medicina. En uno de sus últimos volúmenes, "Tierra, Libro XXXV", Plinio cuenta la historia de un orfebre que trajo un plato inusual a la corte del emperador Tiberio (que lo fue del 14 al 37 d.C.).

El Emperador Tiberio
El plato era una maravilla, hecho de un metal nuevo: ligero, reluciente y casi tan brillante como la plata. El orfebre afirmó que lo había extraído de arcilla simple, utilizando una técnica secreta basada en una fórmula a la que solo él y los dioses tenían acceso.

Pero al emperador Tiberio este "descubrimiento" le preocupó. Era uno de los grandes generales de Roma, que conquistó la mayor parte de lo que hoy es Europa y amasó una fortuna de oro y plata en el camino. También era un experto financiero, que sabía que el valor de su fortuna disminuiría si la gente de repente tuviera acceso a un metal nuevo y brillante que era más raro que el oro.

Relata Plinio en "Naturalis Historiae": "Por eso, en lugar de darle al orfebre la consideración esperada, ordenó que lo decapitaran".

Ese nuevo metal brillante era lo que hoy conocemos como el aluminio, y la decapitación del orfebre marcó la pérdida del metal para el mundo durante casi dos milenios".  

(Todo este largo párrafo entrecomillado está traducido / adaptado de Peter Diamandis: "The Lesson of Aluminum: *Nothing* is Scarce" publicado en noviembre 2021)

Bonita historia, pero falsa...

La historia del orfebre, tal y como la recoge Diamandis, circula profusamente por la red, en distintos textos y documentos, más o menos académicos. En español y en inglés (y supongo que en otros idiomas).

Queriendo ir a la fuente, busqué una versión disponible on-line de la "Naturalis Historiae" en latín. Y aquí encontré una. Yendo al Libro 36 (que trata de la piedra, de materiales de construcción y del vidrio, entre otras cosas), al capítulo LXVI, párrafo 195 dice lo siguiente:

"195 ferunt Tiberio principe excogitato vitri temperamento, ut flexile esset, totam officinam artificis eius abolitam, ne aeris, argenti, auri metallis pretia detraherentur, eaque fama crebrior diu quam certior fuit".

Afortunadamente, también hay versiones disponibles en castellano, y esta es la traducción que una de ellas incluye de este mismo párrafo (ya se nota que está un poco "adornado"):

"195 Se cuenta que en el reinado de Tiberio se inventó un método para mezclar vidrio para hacerlo flexible. El taller del artista quedó completamente destruido por temor a que se rebajara el valor de metales como el cobre, la plata y el oro. Tal es la historia, que, sin embargo, durante mucho tiempo ha estado presente a través de la repetición frecuente más que auténtica".

Interesante comprobar que se habla de un tipo de vidrio, que no se menciona plato alguno, y que, tampoco, se decapita al orfebre. Y que el propio Plinio duda de la veracidad de la historia.

Al parecer, la historia siguió contándose a lo largo de los siglos, y fue Isidoro de Sevilla (ca 556 - 636 d.C.) quien la recogió en sus Etimologías, "corregida y aumentada". Así, en el libro XVI, Capítulo 15, "De vitro",  Párrafo 5 (en una versión en castellano) se lee:

Texto en latín de San Isidoro
"Dicen que, durante el reinado de Tiberio, un trabajador inventó una aleación de vidrio maleable y dúctil (vitri temperamentum). Cuando apareció ante el Emperador, el trabajador le mostró un cáliz hecho de ese material, y Tiberio lo tiró al suelo indignado. El trabajador recogió el cáliz, que estaba todo doblado como si fuera un jarrón de bronce, luego tomó un martillo de su bolsillo y arregló las deformaciones.
Entonces el Emperador le preguntó: "¿Hay algún otro trabajador que conozca la receta de este vaso? " Cuando el trabajador juró que nadie más conocía la receta, el emperador ordenó decapitarlo, temiendo que el secreto "haría que el oro no fuera más valioso que la arcilla y otros metales perderían valor por completo, y en verdad, porque si los vasos de vidrio no se rompieran, serían mejores que el oro y la plata". 

Aquí ya es un cáliz/frasco ("phialam"), que sigue siendo de un tipo de vidrio, aunque maleable y dúctil. Y sí, en esta versión, César ordenó la decapitación del pobre orfebre ("iussit illum Caesar decollari"). O sea que Isidoro fue el creador de esta "fake news" que, casi literal, ha llegado hasta nuestros días.

La inferencia de que este "vidrio" fuera en realidad aluminio es, necesariamente, muy posterior, probablemente del mismo siglo XIX en que el aluminio, por fin, pudo ser aislado y producido en grandes cantidades. Y su veracidad, muy baja, prácticamente nula, porque, aun con la ayuda de los dioses, resulta muy improbable que un orfebre del siglo I, con los medios disponibles, pudiera realizar un proceso que necesitó de toda la tecnología que aportó la Revolución Industrial para poder llevarse a cabo. Pero así funcionan las leyendas y los mitos.
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Posdata con, ahora sí, un poco de verdad científica: 

Lo que sí menciona Plinio es el "alumen", palabra latina que dio el castellano "alumbre".

Piedra de alumbre
Los alumbres a base de sales de aluminio se han utilizado desde la antigüedad, y siguen siendo importantes en muchos procesos industriales. El alumbre más utilizado es el alumbre de potasio (KAl(SO4)2*12H2O). Se utilizó en la Edad Media como coagulante para clarificar líquidos turbios, y como mordiente en teñidos y curtidos. Todavía se utiliza mucho en el tratamiento del agua, en medicina, en cosméticos (como desodorante), en la preparación de alimentos (en levadura y encurtidos) y en la obtención de papel y tela ignífugos.

El alumbre también se usa como astringente, en lápices anti-hemorrágicos disponibles en farmacias, o como bloque de alumbre en las peluquerías de caballeros tradicionales, para detener el sangrado de los pequeños cortes de afeitado.

Roca de bauxita
Debido a la alta afinidad del aluminio por el oxígeno, nunca aparece en la naturaleza como un metal puro. En cambio, se encuentra fuertemente unido como óxidos y silicatos en un material parecido a la arcilla llamado bauxita. Pero, mientras que la bauxita es 52% de aluminio, separar el mineral de metal puro fue una tarea compleja y difícil. Y hubo que esperar al siglo XIX para que se dieran las circunstancias que permitieron su identificación como metal, primero, y su aislamiento después. Estos fueron los principales hitos y sus protagonistas:

1) William Nicholson (1753-1815) - En 1800 descubrió la electrólisis, proceso que, mediante una corriente eléctrica, permite separar los diferentes elementos que configuran un compuesto.

2) Humpry Davy (1788-1829) - Inglés; se aplicó con denuedo a descubrir nuevos metales mediante la electrólisis, y a bautizar los que iba encontrando. Suyos fueron el descubrimiento del potasio y del sodio en 1807 y del boro, magnesio y calcio en 1808. También bautizó como "aluminium" al metal que se debería obtener de la electrólisis del óxido de aluminio, pero que no llegó a aislar, porque la potencia de las pilas eléctricas disponibles en esos momentos no lo permitía.

3) Entre 1825 y 1845, el danés Hans Christian  Ørsted y el alemán Friedrich Wöhler descubrieron que, al calentar cloruro de aluminio anhidro con amalgama de potasio y luego destilar el mercurio, dejaba un residuo de aluminio puro.

4) En 1854, el francés Henri Sainte-Claire Deville creó el primer proceso comercial de extracción, reduciendo el precio de forma drástica. Sin embargo, el metal todavía era caro y escaseaba.

5) Fue la creación de una nueva tecnología revolucionaria, descubierta de forma independiente y casi simultánea en 1886 por el químico estadounidense Charles Martin Hall y el francés Paul Héroult, lo que lo cambió todo.

El proceso Hall-Héroult, como se le conoce ahora, utiliza la electricidad para liberar el aluminio de la bauxita. De repente, todos en el planeta tuvieron acceso a cantidades ingentes de metal barato, ligero y flexible. Lo que propició el aumento exponencial de su uso en todo tipo de aplicaciones.

(Bueno, ahora, comienzos de 2022, con los precios actuales de la electricidad, barato ya no es...)

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Posdata: El aluminio también tiene otras aplicaciones más "modestas" y desconocidas, algunas muy curiosas, como las que realiza la empresa ADASA (Aplicaciones del Aluminio S.A. - www.adhesivosyetiquetas.com ) en sus instalaciones de Zamudio (Vizcaya), bajo la experta y apasionada batuta de mi buen amigo Pedro H.. He aquí una muestra:





3 comentarios:

  1. Desde luego no parece posible que alguien obtuviera aluminio metálico antes del descubrimiento de la electricidad controlada (los rayos no cuentan). Parece que el primer objeto de este metal fue un sonajero regalado al hijo del emperador Napoleón III y estamos hablando de mediados del siglo XIX. Entonces era mucho más caro que el oro y el platino. Un aspecto interesante del aluminio es que, siendo muy reactivo, se oxida inmediatamente al contacto con el aire, pero, a diferencia del hierro, su óxido es blanco y es protector, de modo que ya no se oxida más bajo la superficie.

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  2. querido Ángel:

    Toda una lección con muchas curiosidades históricas que desconocía.

    Muchas gracias por la mención.

    un abrazo y nos vemos pronto

    Pedro H

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  3. Felicitaciones por el artículo.
    Rastrear la veracidad de la historia orfebre de Tiberio tiene trabajo y está muy bien escrito.
    Además quisiera aportar tres cosas curiosas del aluminio, dos históricas que pueden servirle a Ángel para tirar del ovillo como le gusta:
    1. La cubertería de aluminio de Napoleón III
    2. Las monedas de aluminio. Los que tenemos más edad recordamos la de 50céntimos (de peseta) como la primera española que tuvimos en nuestras manos. Personalmente recuerdo mi primer contacto con las monedas de aluminio en la Alemania Oriental, cuya exportación estaba prohibida y saqué siendo un adolescente a través del Checkpoint Charlie de Berlín escondidos en mis calcetines. Serían unos 73 pfennig que podrían haberme mandado a una cadena perpetua en un gulag de la Alemania oriental (jajajajaja)
    3. El aluminio arde, aunque con una llama muy pequeña. Si hemos celebrado una fiesta con fuego y hemos lanzado las latas de bebida a la hoguera, hemos visto que al día siguiente las latas de aluminio han desaparecido, pero las de acero siguen ahí. Ángel nos podría deleitar en un blog con el magnesio, un primo cercano al aluminio que en vez de arder, explota. Su uso en forma de polvo en la fotografía antigua causó muchos accidentes.
    Ánimo Ángel, me encantan tus posts.

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