El curioso origen de algunos juegos populares

 1 - Parchís

Es un juego milenario cuyo origen está en La India. Allí se llama "पचीसी - Pachisi, que quiere decir 25 en hindi, porque esa era la mayor puntuación que se podía obtener en una tirada. Hubo otro juego parecido más antiguo, que se llamaba "chaupar".

Las reglas básicas del "Pachisi" son las que nos han llegado a nuestro "Parchís", aunque hay algunas variantes interesantes:

- No se usaban dados, sino conchas de cauri ("Monetaria moneta"), un molusco bivalvo que, como su nombre latino revela, en la antigüedad llegó a usarse como moneda. Normalmente 6 conchas, y la puntuación dependía del número de conchas que caían "boca arriba", es decir, con la hendidura visible, de esta forma: 

Conchas de cauríes

   - 2, 3, 4 o 5 conchas "boca arriba" --> mover 2, 3, 4 o 5 casillas

   - 6 conchas --> mover 6 casillas y turno extra

   - 1 concha --> 10 casillas y turno extra

  - 0 conchas (o sea todas "boca abajo", lo que es muy difícil) -->  mover 25 casillas (de ahí el nombre del juego) y turno extra

- Cada jugador tiene 4 fichas de un color: Rojo, Verde, Amarillo o Negro (en nuestro parchís, el azul ha sustituido al negro).

- Para poner la primera ficha en juego vale la primera tirada de cauríes, salga lo que salga. Para sacar las tres fichas restantes, tiene que darse una tirada de 0, 1 o 6 (o sea, las que tienen turno extra).

- El jugador puede decidir pasar el turno, sin mover nada, una vez conocido el resultado de la tirada de conchas.

Se cuenta que el tercer emperador mogol de La India, Akbar el Grande (1542-1605), organizaba partidas "vivientes" de pachisi, donde las fichas eran 16 mujeres de su harén. Se supone que él era el único jugador, que movía la ficha que quería en cada tirada. No es difícil imaginar el destino de la primera "ficha" que llegaba al "charkoni", la meta, donde aguardaba el emperador.

¿Cómo y cuándo llegó el pachisi a Europa, y, por tanto, a España? Pues parece que fue en la época colonial, cuando las tropas inglesas "importaron" ese juego de mesa a la metrópoli. Y, desde ahí, se hizo popular en toda Europa.

2 - Yoyó (así dice la RAE que hay que escribirlo) 

Hay una copa ateniense del siglo V a.C. en la que se ve a un joven sosteniendo un objeto esférico pendiente de un hilo. Nada indica que ese objeto tuviera movimiento, pero hay quien ha querido ver ahí la representación de un antiguo yoyó. 

Que ese curioso nombre (allí se escribía "yo-yo") proviene de Filipinas, del idioma tagalo, y significaría "viene-viene". Porque en esas islas los indígenas usaban un artilugio similar a un yoyó grande como arma de caza: lo lanzaban "con efecto" contra las patas del animal, y, al enrollarse, provocaban su caída, lo que facilitaba su captura (parecido a como los gauchos utilizan sus "boleadoras").

El origen del yoyó como juguete se sitúa en la China del año 1000 a.C., pero no hay pruebas fehacientes de ello. A Europa llegó de forma paulatina, y con diferentes nombres según el país: "quiz" en Inglaterra, "bandalore" o "emigrette" en Francia o "rocchetto" en Italia. Los discos eran de madera.

Yoyó modelo Russell, muy solicitado
en los años 80

Fue en 1928 cuando un emigrante de origen filipino, Pedro Flores, abrió la fábrica "Yo-yo Manufacturing Company" en Santa Bárbara (California), con tal éxito que, un año después, ya funcionaban otras dos fábricas en Los Ángeles y Hollywood, fabricando 300.000 unidades diarias. Y así se popularizó el nombre de "yo-yo").

La principal "innovación" introducida por Flores fue que, en lugar de una cuerda atada con un nudo al eje, lo que sólo permitía que el disco bajara y subiera, la cuerda era de doble hilo y rodeaba el eje, lo que abría nuevas posibilidades (como los famosos "dormilón", "el columpio" o "el perrito"). En 1930, el emprendedor Donald F. Duncan, viendo el enorme potencial del juguete, compró a Flores su empresa.

En los años setenta y ochenta el plástico sustituyó en muchos casos a la madera. Algunos yoyós modernos son de acero inoxidable y con rodamientos de bolas en su interior que mejoran su rendimiento y posibilidades.

3 - Hula-hula 

Así lo recoge el diccionario de la RAE, aunque popularmente se conoce como "hula-hop". Que proviene del inglés "hula-hoop", donde "hoop" significa simplemente "aro". Aros de madera o metal que fueron usados como juguetes infantiles desde la antigüedad. También eran usados por los indios americanos en algunas de sus danzas tribales.

Fue en el siglo XVIII cuando marinos ingleses vieron que los nativos de Hawai practicaban una danza con movimientos similares a los que en la metrópoli se hacían con el aro (pero sin el aro). La danza se llamaba "hula" y, a partir de entonces, el aro utilizado para este juego comenzó a llamarse "hula-hoop". 

El auge del hula-hula tuvo lugar a finales de la década de los 50 del siglo pasado, concretamente en julio de 1958, cuando la empresa Wham-O lanzó en California un modelo de plástico de 110 cm (42") de diámetro a $1.98 la unidad. El plástico utilizado era polietileno Marlex, muy resistente, que había sido desarrollado pocos años antes.

La idea vino de un californiano que había visitado Australia e informó a los dueños de la empresa sobre cómo las niñas australianas giraban aros de bambú alrededor de la cintura en clase de gimnasia.

Se vendieron 25 millones en menos de 4 meses; más de 100 millones en 2 años.

El 13 de octubre de 2020, en una pared de una calle de Nottingham (UK), apareció un grafiti que fue denominado como "Hula Hooping Girl" y que fue reivindicado pocos días después por Bansky. La niña utiliza como aro para su juego una cubierta de rueda de bicicleta:

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